La reforma sanitaria de Estados Unidos habría permitido a unos 6,6 millones de jóvenes unirse a los planes de cobertura de salud de sus padres el año pasado, informó el viernes un reporte, aunque los gastos médicos y las deudas siguen siendo un problema.
La ley de reforma del sistema de salud del 2010 del presidente Barack Obama permitió a los jóvenes, que antes tenían la mayor tasa de personas sin seguro médico del país, permanecer en los planes privados de sus padres hasta los 26 años.
Esta medida es quizás el elemento singular más popular de la norma, la legislación sobre salud más radical en casi 50 años y un logro político de Obama.
Sondeos muestran que los estadounidenses están profundamente divididos sobre la ley antes de un dictamen de la Corte Suprema de Justicia sobre su constitucionalidad previsto para fines de junio.
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